Franck, que estudia Empresariales en París, regresa a la casa familiar para pasar un periodo como becario en la fábrica donde su padre lleva trabajando treinta años. Franck es asignado al Departamento de Recursos Humanos. Seguro de sí mismo, cree que puede desbloquear las negociaciones sobre la reducción de la jornada laboral, que llevan tiempo enfrentando a la dirección y los sindicatos. Hasta que descubre que sus esfuerzos están sirviendo en realidad para poner en marcha una restructuración que implica el despido de unos cuantos empleados, incluido su padre.