La revolución femenina llegó al fin en 2011, cuando la comedia dijo el “sí, quiero” al humor hecho por mujeres. La nueva reina de la comedia Kristen Wiig se coronó con esta película sobre la amistad, la soledad y el amor. Wiig encadena chiste con chiste y los secundarios, con John Mad Men Hamm a la cabeza, nunca se quedan atrás.