La película cuenta las peripecias de los habitantes de un imaginario pueblo castellano enclavado en el centro del País Vasco llamado Tellería, que desea, tras 700 años de historia, pasar a ser parte del territorio vasco. Tras la negativa del gobierno de esta última comunidad, un curioso hallazgo en el santuario del pueblo originará que los osados habitantes de Tellería pidan su anexión nada menos que a uno de los países más desarrollados del mundo: Suiza.
La comedia es el territorio en el que se ha desarrollado la carrera como director de Kepa Sojo (Llodio, Álava. 1968), que arrancó en 1997 con el cortometraje 100 maneras de hacer pollo al txilindrón. Dirigió después Looking for Chencho (2002) y Cuando puedas (2003) antes de rodar su primer largometraje, El síndrome de Svensson (2006). En 2013 volvió al formato corto con Loco con ballesta, que le valió la nominación al Goya al Mejor Cortometraje, y en él continuó con Hileta (2016), que formó parte de Zinemira Kimuak, Ronda de Poniente (2017) y Khuruf (2018), cuyo proyecto fue premiado en el Festival de Gijón. La pequeña Suiza es su segundo largometraje.